La facilidad y la economía.- Estos son los atributos principales que tiene una cámara digital y lo que más entusiasmó a los "nuevos" fotógrafos que van surgiendo de la mano de la tecnología. Aparte de los alumnos que buscan en la fotografía una profesión de la cual vivir, en la Facultad de Artes de la UNT se dicta un curso para novatos todos los sábados. Algunos de los alumnos dieron su testimonio a LA GACETA:
Adela Aráoz.- Ya jubilada, afirma que no aspira a hacer fotos artísticas. "Simplemente quería aprender a usar la máquina y sacar buenas fotos. Tenía antes una cámara con rollo, pero era muy caro, porque había que esperar hasta el revelado -con todos los costos pagados- para recién saber si las fotos eran buenas o no", destaca. "En cambio ahora, con la cámara digital puedo seleccionar, borrar lo que salió mal, y hacer copia solamente de lo que más me gusta. Es mucho más económico", expresó. Adela comentó que viaja mucho y saca fotos de los lugares que visita. También usa mucho la máquina para captar imágenes de su nieta, que tiene tres años.
Edgardo Naval.- Es compañero de Adela, y coincide en que la cámara digital brinda mayores facilidades para hacer buenas fotos. "Está la posibilidad de borrar las que no salieron bien, se las puede ver en la computadora y uno se va enganchando más y más. Todavía no las he pasado a papel, pero estoy seleccionando las que quiero imprimir", revela. A él le gusta sacar fotos para tener recuerdos de las vacaciones y los festejos familiares.
Graciela Agudo.- También asiste al curso, es profesora de Educación Física y emplea la fotografía para capturar paisajes, retratos y para sacarles fotos a sus sobrinos. "La cámara digital es más cómoda, es más práctica para llevar, bajás las fotos en la computadora, elegís la que querés imprimir o borrás si salió mal y la sacás de nuevo", detalló.